Cortes de cerdo ibérico para cocinar a la brasa
Para que una carne sea ideal para la parrilla debe tener una gran cantidad de grasa infiltrada que asegure el sabor y lo jugosidad de la carne. Teniendo en cuenta este concepto podemos estar seguros que la carne ibérica es perfecta para cocinar a la parrilla. También tenemos una gran variedad de cortes que podemos aprovechar sus diferentes tostados exteriores y la caramelizarían de los azucares. Este tipo de carne al colocarlo a la parrilla desprenden un tipo de aceite natural que actúa como antiadherente y al gotear sobre las brasas y evaporarse dejan un sabor único a la carne.
Secreto Ibérico
Como uno de estos espectaculares cortes tenemos el Secreto Ibérico es un corte característico por su perfecto veteado. Esta parte del cerdo ubicada entre las extremidades anteriores y el tocino ofrece un sabor único con mucho jugo y un aspecto muy bonito para su presentación.
Presa Ibérica
Ahora tenemos a la prensa ibérica que al igual que el secreto cuenta con una sustanciosa cantidad de grasa intramuscular que ayuda a tener un mejor sabor y mayor jugosidad. Se recomienda cortar este tipo de carne en cortes horizontales para así mantener un buen bocado lleno de jugo y grasa con mucho sabor.
Pluma Ibérica
Pluma ibérica es una pieza perfectamente equilibrada en cuanto a grasa y magro, es un corte bastante fino, el más fino de todos los demás con una forma triangular. Tiene aproximadamente unos 100gr de peso. Es un corte con una textura expectacular semejando sus fibras musculares con la parte alta del jamón y para muchos es uno de los mejores bocados de cerdo ibérico.
Para dejar estos cortes perfectos y lograr conseguir esos sabores únicos que se describen debemos dejar reposar al menos 10 minutos después de retirar la carne del fuego. De esta manera la carne adsorbe nuevamente todos los jugos y queda muy tierna.